Amaterasu, la diosa del sol

La diosa del sol en la mitología japonesa se llama Amaterasu y es una de las principales deidades del sintoísmo. Su historia se entrelaza con la creación del mundo y su lucha contra la oscuridad. En Japón la adoran como la deidad madre de la casa imperial y como la deidad suprema. 

Contexto histórico y mitológico de Amaterasu la diosa del sol

Amaterasu tiene un rico contexto histórico y mitológico que la convierte en una figura de gran relevancia en la cultura y religión japonesa.

Origen y leyendas de Amaterasu en la mitología japonesa

Según las leyendas, Amaterasu es hija de Izanami e Izanagi, quienes la hicieron soberana del cielo. De acuerdo con la mitología, Amaterasu nació del ojo izquierdo de Izanagi durante una purificación. Estas historias mitológicas explican el papel de Amaterasu como deidad del sol y su importancia en la cosmogonía japonesa.

Relación de Amaterasu con los dioses Susanoo, Izanami e Izanagi

Amaterasu es la hermana mayor de Susanoo, el dios de la tormenta. Su relación con otros dioses, como Izanami e Izanagi, quienes son sus padres, también es fundamental en su mitología. Estas conexiones familiares y divinas contribuyen a darle un contexto histórico y genealógico relevante en la mitología japonesa.

Importancia de Amaterasu en el sintoísmo y la cultura japonesa

Amaterasu se considera la deidad madre de la casa imperial y la deidad suprema de Japón. Su relevancia en el sintoísmo, la religión tradicional japonesa, es incuestionable. No en vano, el Gran Santuario de Ise en la Prefectura de Mie es el principal lugar de culto de Amaterasu, lo que demuestra su importancia en la práctica religiosa y cultural de Japón.

El mito de Amaterasu y la cueva celestial

El mito de Amaterasu y la cueva celestial es una historia fascinante que narra el encierro de la diosa del sol y la oscuridad que se apoderó del mundo. Esta parte de su leyenda revela la lucha entre el bien y el mal, y cómo la luz finalmente prevaleció sobre las sombras.

Encierro de Amaterasu y la oscuridad en el mundo

Según cuenta la mitología japonesa, Amaterasu fue encerrada en una cueva celestial debido a las acciones de su hermano, Susanoo. Este encierro tuvo terribles consecuencias, ya que el mundo quedó sumido en tinieblas. La falta de luz solar causó estragos en la tierra, haciendo que las plantas se marchitaran y los malos espíritus se propagaran.

Los intentos de los dioses por liberar a Amaterasu

Ante la desesperada situación, los dioses se unieron para encontrar una solución y liberar a Amaterasu de su confinamiento. Tras varios intentos fallidos, decidieron utilizar un espejo sagrado para reflejar la luz y atraer la atención de la diosa. Sin embargo, ninguno de estos intentos tuvo éxito hasta que una diosa de la danza realizó una danza provocativa para captar la atención de Amaterasu.

La danza de la diosa de la danza y el regreso de la luz

Finalmente, la danza de la diosa de la danza logró su objetivo: Amaterasu, atraída por la música y la festividad, salió de la cueva y devolvió la luz al mundo. Asimismo, con su regreso, hizo que se desvanecieran las tinieblas. Además las plantas volvieron a florecer y ahuyentó a los espíritus malignos. Este evento marcó un momento crucial en la mitología japonesa y simboliza la victoria del bien sobre el mal.

Amaterasu como deidad suprema y antepasada de la familia imperial japonesa

Amaterasu ocupa un lugar de gran importancia en la religión y cultura del país. Su estrecho vínculo con la casa imperial japonesa la convierte en la deidad madre y protectora de la familia imperial.

Vínculo de Amaterasu con la casa imperial y la adoración en el Gran Santuario de Ise

La conexión de Amaterasu con la casa imperial se remonta a tiempos ancestrales, considerándola su antepasada mítica. En Japón, se rinde un especial culto a la diosa en el Gran Santuario de Ise, ubicado en la Prefectura de Mie, donde se le rinde homenaje como la gobernante del reino celestial Takamagahara.

El Gran Santuario de Ise es uno de los lugares más sagrados del shinto y es el principal lugar de culto dedicado a Amaterasu. Cada 20 años, los edificios del santuario son demolidos y reconstruidos siguiendo la tradición conocida como Shikinen Sengu, que busca mantener la pureza y vitalidad espiritual del lugar.

La espada de Susanoo y la descendencia divina de Amaterasu

Según la leyenda, Amaterasu tomó la espada de su hermano Susanoo y la rompió en tres pedazos. Estos fragmentos se convirtieron en tres deidades femeninas, quienes desempeñarían un papel importante en la mitología japonesa. Asimismo, Susanoo le arrebató a Amaterasu su collar de joyas, el cual transformó en una niebla de la cual nacieron cinco deidades masculinas.

Estas ocho deidades son consideradas los ancestros de los nobles japoneses y su linaje divino se fusiona con el origen de la casa imperial, reforzando la posición de Amaterasu como la antepasada mítica de la familia imperial japonesa.

La influencia de Amaterasu en la cultura y religión japonesa

La figura de Amaterasu trasciende la mitología y ocupa un lugar central en la cultura y religión de Japón. Su representación en el arte japonés se asocia con la bondad y se la suele representar sentada espalda con espalda con su hermano Tsukuyomi, el dios de la luna. Los gallos y el cuervo también están asociados con ella.

La influencia de Amaterasu en la vida cotidiana de los japoneses es evidente en festividades y rituales celebrados en su honor. Sus enseñanzas y virtudes también continúan siendo transmitidas en la sociedad japonesa, siendo una fuente de inspiración en la búsqueda de una vida equilibrada y en armonía con la naturaleza y los demás seres vivos.